"Un abrazo por si tienes frío, una sonrisa para cuando estés triste y mi mano para cada reto": Nochevieja en la unidad de oncohematología

31 de diciembre. Nochevieja. Ese día fui al hospital porque me apetecía pasarlo con los enfermos. Hay mucha gente sola que, por desgracia, no tiene a nadie con quien pasar la Navidad.

Además, creo que el final de un año y comienzo del siguiente es algo realmente importante que, de algún modo, marca una etapa.

Me gustaba la idea aportar mi grano de arena en ese sentido, para que los pacientes pudieran -metafóricamente- dar un paso adelante, seguir, afrontar las cosas que viniesen poco a poco, sus retos.

El equipo de voluntarios de SECUNDA Smile decidimos realizar una manualidad de las doce uvas de la suerte: un racimo de uvas con doce granos y el nombre de cada paciente en la hoja del ramillete.

Como quedaban algunas uvas por hacer, las terminé ese mismo día y me puse en contacto con el responsable del hospital para saber el nombre de todos los pacientes que iban a pasar la Nochevieja en la U-55.

Junto a los racimos, pensamos una frase motivadora para poder en cada uno. Algo que transmitiera fortaleza y ánimo. Tras pensarlo un rato me decanté por: un abrazo por si tienes frío, una sonrisa para cuando estés triste y mi mano para cada reto.

Con esta frase queremos decirles que no están solos -aunque a veces se sientan así o piensen que nadie entiende lo que está pasando-, que estamos ahí para apoyarlos, para escucharlos, para todo lo que puedan necesitar.

Tras acabar todos los racimos, comencé con el reparto. Visité las habitaciones entregando a cada paciente su racimo personalizado. Cada uno tenía que escribir una palabra en cada uva, algo que quisieran, necesitasen o sintieran.

Fue una experiencia muy grata. A veces pienso que no aporto mucho, que quizá no quieran mi compañía… es uno de los temores que tengo. Enseguida pude comprobar que ¡todo lo contrario! Los pacientes lo recibían con mucha ilusión, agradeciéndonos que estemos pendientes de ellos.

En el reparto una señora me recito un poema; algunos se emocionaron; y otros lo expresaron con la mirada. Entre todos me transmitieron mucha tranquilidad, calma y fortaleza.

La experiencia fue muy, muy bonita. Después de todo entendí que sí, que realmente es mucho lo que hacemos en el hospital y salí muy llena de cariño y de reconocimiento.

Conforme salía mandé un mensaje a mis compañeros de equipo para contarles lo bien que había ido todo y lo feliz que me sentía.

Agradezco mucho esta oportunidad. Es algo que te hace creer como persona y te da una visión que, de otro modo, es imposible alcanzar.

Laura Cerezuela
Estudiante de Enfermería. Voluntaria de SECUNDA Smile 
en la Unidad deoncohematología Hospital Santa Lucía.
Proyecto desarrollado en colaboración con la Obra Social "la Caixa"